La electromovilidad, desafíos, beneficios y proyecciones.

Ya desde el año 2018 que la electromovilidad es poco a poco más comentada en los medios de comunicación chilenos, encontrándonos que las ventas de vehículos eléctricos en el país va en aumento conforme pasa el tiempo, y es que la electromovilidad es un fenómeno que poco a poco se está marcando como tendencia tanto en el resto del mundo como en Chile. Entonces ¿qué es la electromovilidad? Bueno, se refiere a cualquier sistema de impulso o tracción que aplique energía eléctrica a distintos medios de transporte, por lo que existen un gran cantidad de vehículos disponibles que implementan electromovilidad.


Beneficios

Se reducen los costos de mantenimiento: una de las actividades más comunes y necesarias que debe realizar cualquier dueño de un vehículo es la de realizar mantenimientos regulares, los cuales, por supuesto, no tienden a ser baratos. Un vehículo eléctrico en cambio, al contar con muchas menos partes móviles, su mantenimiento es más sencillo y económicos. Además de que, al cambiar el combustible por electricidad, los gastos de mantenerte en movimiento también disminuyen.

Sin impuesto verde: Los vehículos eléctricos están exentos del pago del impuesto verde a fuentes móviles que aplica a los automóviles nuevos, livianos y medianos.

Más seguro: Por regla general los vehículos eléctricos poseen un centro de gravedad más bajo que los tradicionales, lo cual disminuye bastante las posibilidades de un volcamiento. Sumado a esto, al no utilizar combustible, se reduce el riesgo de incendio en una colisión.

Sin restricciones: En el caso de los autos eléctricos o los híbridos, no están sujetos a restricciones vehiculares en casos de preemergencias o alertas ambientales.

Amigable con el medio ambiente: Un vehículo eléctrico no genera emisiones contaminantes para el ambiente, lo cual los convierten en vehículos más sustentables.


Los desafíos de la electromovilidad.

Al ser una tecnología que solo ahora se está masificando aún quedan muchos desafíos, especialmente logísticos y de infraestructura, para que la tecnología se encuentre masificada y disponible para todo el público.

Uno de los principales desafíos como país es la implementación masiva de electrolineras, es decir, la versión eléctrica de una gasolinera. Además son necesarias una serie de regularizaciones respecto a la industria.

Aunque dentro de estos desafíos Chile se encuentra con grandes incentivos y planes de mejora, de tal manera que nuestro país se ha planteado como objetivo fomentar el uso eficiente de la energía, estableciendo una ambiciosa meta de 20% de reducción de la demanda energética respecto de la proyectada al año 2025 y la electromovilidad juega un rol fundamental en ello.

Iquique y la electromovilidad

Como decíamos, la electromovilidad se encuentra en alza en todo el mundo, y en el caso de latinoamérica Chile se encuentra en una posición de vanguardia. Y si bien muchas veces los avances e implementaciones tecnológicas se concentran en la región metropolitana, Iquique ya ha hecho avances hacia esta tecnología. Actualmente existe una electrolinera en la ciudad, inaugurada a finales del 2019 y con ubicación en el Mall Zofri, sumándose a otras ciudades como Rancagua, Santiago, Concepción, Antofagasta, Copiapó y Coquimbo en la implementación de estos dispensadores para vehículos eléctricos.

Igualmente, la Cooperativa de Turismo ALTUS ha puesto en marcha un nuevo City Tour que incluye la utilización de scooters eléctricos, por lo que es posible probar estos vehículos y conocer parte de la cultura y el paisaje urbano de la ciudad.

El futuro ¿qué se viene?

Si bien hoy en día el tema de la electromovilidad aún presenta algunos inconvenientes (siendo el más común el alto precio inicial que un vehículo de estas características posee) con un creciente mercado se proyecta que los precios vayan progresivamente disminuyendo, es más se estima que, entre 2025 y 2030, un vehículo eléctrico costará lo mismo que uno de combustión interna, esto, junto al impulso de la propia industria, donde varios de sus principales fabricantes han anunciado que abandonarán los vehículos a combustión en el corto plazo, seguramente dará el impulso para la masificación definitiva de esta tecnología, por lo que el futuro para la misma se espera que sea próspero.

Asimismo, las proyecciones más optimistas señalan que para el 2050, el parque de vehículos livianos en chile estaría conformado por un 40% de vehículos eléctricos, y la matriz de generación eléctrica se estima que esté compuesta por más de un 70% de energías renovables.